El sábado y domingo pasados, los 17 y 18 de octubre, el pueblo de Tamshiyacu ha recibido la visita de dos congresistas. ¿Por qué será?
Está en juego, en estos días, la empresa privada “Tamshi”, que tiene cerca de Tamshiyacu una grande plantación de cacao. En contra están unas ONG y a favor está la gente de Tamshiyacu, en particular los que trabajan en la plantación de cacao de Tamshi. Los trabajadores son más de 200.
El viernes pasado, un grupo de trabajadores de la empresa Tamshi, incluyendo también agricultores asociados a Tamshi que producen su propio cacao, han querido conocer la posición de la parroquia frente a la empresa Tamshi. La posición de la parroquia ha sido siempre la siguiente: estamos en contra de la deforestación de los bosques primarios y la empresa actual “Tamshi” no deforesta bosques primarios, más bien Tamshi reforesta. Tiene además un lote grande dedicado totalmente a la conservación del bosque para ofrecer una muestra del bosque amazónico, en particular a los que vienen de lejos para hacer investigación sobre los bosques amazónicos.
Es verdad que a mitad del año 2013, en el espacio de seis meses, de junio a noviembre 2013, se han destruido más de 2,000 has. de bosque primario. Pero eso no fue la obra de la empresa Tamshi, sino de la empresa de Denis Melka “Cacao del Perú Norte”. Felizmente fue paralizada su obra. Tenía proyectado deforestar 45,000 has. más, o sea ¡20 veces más de lo que había deforestado! La deforestación de Denis Melka fue un desastre. En cuanto a la empresa Tamshi, ella recogió el desastre que dejó Denis Melka e hizo con mucha inversión y mucho trabajo un proyecto agroforestal, dedicándose a plantar tanto arboles como a plantar cacao. No olvidemos que plantar árboles y vigilarlos durante más de 20 años necesita mucha inversión y continuidad. ¿Quién puede hacer eso? Tamshi lo está haciendo y así está saneando el desastre dejado por Denis Melka. No quiero decir que se puede deforestar bosques primarios para hacer proyectos agroforestales. No. Los bosques primarios de la Amazonía deben ser respetados porque son absolutamente necesarios para “el cuidado de la Casa común”, como dice el papa Francisco. Si necesitamos más cacao, que lo hagamos con los mismos pequeños agricultores en sus chacras, o que lo hagamos a partir de purmas ya deforestadas, de tal manera que en vez de tener menos árboles, tendremos al final más arboles, debido a plantaciones de cacao que necesitan sombra, árboles.
No olvidemos que actualmente muchos pequeños agricultores se dedican a hacer carbón y que así queman forzosamente muchos árboles. ¿No sería mejor que se dedicaran a producir cacao, sabiendo que las cepas del cacao duran hasta más de 25 años, de tal manera que no necesitarían deforestar y abrir chacras cada 2 o 3 años?
Conservemos nuestros bosques primarios en la Amazonía, y si queremos extender nuestras plantaciones de cacao -de hecho es más rentable que otros sembríos-, hagámoslo con los pequeños agricultores que saben utilizar sus purmas para producir una o dos hectáreas de cacao, sin tocar bosques primarios.
NOTA: La empresa Tamshi ya tiene una buena experiencia con los pequeños agricultores, gracias a su proyecto PAPEC (Programa de Alianza para Pequeños Agricultores de Cacao). Con ese proyecto de asesoramiento y práctica para producir un buen cacao, varios pequeños agricultores alcanzaron tener su propia plantación, mejorar su producción y aumentar sus ingresos, pudiendo ahora enviar y mantener a sus hijos en la Universidad; un sueño que tenían desde tiempo y que ahora pueden cumplir. Pasa igual con varios trabajadores de la empresa que han mejorado sus ingresos y pueden entonces enviar y mantener a sus hijos en estudios post-secundarios.
P. Yvan Boucher